El músico y actor cita en concreto el caso del INCAA, cuya financiación pública ha sufrido una reducción drástica. Defendió a Lali Espósito de los ataques el presidente y rechazó las "peleas que no tienen sentido".
Por Javier Herrero
Con motivo de la promoción de su más reciente álbum, ‘Mejor que ayer’, Diego Torres está de regreso por España, donde, como ha sucedido en su propio país, Argentina, un sector de la derecha ha atacado al mundo de la cultura como un ámbito de subsidiados que parasita al Estado.
“Esa guerra (del presidente Javier Milei) es innecesaria”, señaló en conversación con EFE en Madrid este músico, al subrayar que “los negocios corruptos de la política no están en apoyar la cultura”.
Torres (Buenos Aires, 1971), que procede de una saga familiar de artistas, cita en concreto el caso del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), cuya financiación pública ha sufrido una reducción drástica bajo esos argumentos.
“Hay entes que se autofinancian, como el INCAA, que es además nuestra identidad, nuestras historias que proyectan lo que es Argentina, y me parece que es una batalla innecesaria para este presidente”, lamentó.
El músico y actor se refirió también al enfrentamiento que Milei sostiene con su compañera de profesión, Lali Espósito, desde que esta calificara la victoria electoral del ultraderechista como algo “peligroso” y que el mandatario argentino la acusara de vivir a costa del erario público al participar en conciertos subvencionados, entre otras cosas.
“Precisamente Lali ha trabajado toda la vida en el sector privado y no en el estatal, aunque haya hecho uno o dos festivales. Es ridículo decir eso y se malintencionan las cifras que se pagan. Todo esto lo que hace es polarizar más”, defendió.
Torres, que se define como una persona con “criterio independiente”, rechazó las “peleas que no tienen sentido” y que distraen de lo importante: conseguir “un país con más igualdad y más oportunidades, con un Estado presente pero bien administrado, un sector privado que invierta bajo condiciones claras y una economía estable, sin inflación y con leyes también claras”.
“Quiero ver esperanza en Argentina porque tengo sobrinos que tienen muchas ganas de salir adelante. Pero convivo también con otro lado mío diciéndome que esta película ya la vi, que ya sé cómo termina y que por eso uno no se puede dejar engañar, lo cual no significa que no esté comprometido con lo que pasa en mi país”, dijo.
“El darte cuenta que el tiempo pasa”
Decidido a ponerle más color al mundo, a principios de marzo publicó ‘Mejor que ayer’ (Sony Music), el más reciente álbum de una carrera musical que comenzó cuando ya se había dado a conocer como actor con ‘Diego Torres’ (1992) y que, según afirma, con los años se ha convertido en la “columna vertebral” de su polifacética personalidad.
Con tres álbumes grabados en los últimos cuatro años, se reconoce en un momento “de buena inercia” en el ámbito musical, como demuestra la exploración de géneros en su último disco, con temas como el funk-soul a lo Bruno Mars que es ‘Tú y yo’ y el reencuentro con Carlos Vives en ‘Kapun’.
“Cuando la compusimos sentía que en ese coro ya estaba Carlos sonando, así que le escribí. Le encantó y ahí empezamos a tirarnos ideas de una manera muy natural”, cuenta sobre el tema.
No es la única colaboración del repertorio, ya que, además de la guitarrista paraguaya Berta Rojas, en ‘Las leyes de la vida’ por fin comparte micrófono con sus sobrinos Ángela y Benja Torres, un “sueño” que, reconoce, les hizo “mucho bien como familia”.
“A menudo pasamos la tarde tomando unos mates y mostrándonos canciones. Así nació la idea de escribir juntos esta canción que habla de la familia, de darnos cuenta de que éramos millonarios y no por el dinero, sino porque estaban la abuela, el abuelo… El darte cuenta que el tiempo pasa, que algunas personas que estaban no van a volver y valorar las cosas antes de que sea demasiado tarde”, explica.
EFE.